Siempre me gusta animar a mis compañeros de networking diciendo que son unos “valientes” por que se que a muchos no les ha resultado fácil afrontar sus miedos y prejuicios a la hora de dar el paso y participar en este tipo de actividades.
Por eso, este post va dirigido a esos y esas valientes que entienden que, para impulsar su marca personal o empresarial necesitan mantenerse activos en la búsqueda de nuevas oportunidades y quieren saber cómo hacer networking efectivo con resultados reales a medio plazo.
Al igual que hice en mi anterior post si continúas leyendo te mostraré, desde mi experiencia personal, cuáles son los aspectos clave que debes manejar para aprovechar este tipo de actividades y que te resulte más fácil establecer nuevos contactos, destacar con tus presentaciones o poner en marcha acciones conjuntas con otras marcas o profesionales.
¿Qué quieres conseguir haciendo networking?
Márcate objetivos. Sólo con ganas y motivación no conseguirás más que ampliar tu red de amistades y eso, aunque está muy bien, no es el fin que pretendemos.
Necesitas saber por qué y con quién deseas entrar en contacto y cómo puedes conseguirlo. Echa un vistazo a su página web, blog o redes sociales para conocerles mejor y si sus intereses coinciden con los tuyos. En ocasiones puedes ayudarte de otros compañeros para alcanzar tu objetivo.
Recuerda que a la hora de hacer contactos es fundamental saber lo que quieres y que debes estar abierto a todos y a cualquier tipo de conversación. Si sabes de lo que estás hablando y lo que buscas, tus compañeros te tendrán en consideración y fortalecerás tu imagen de marca.
Aporta sin esperar nada a cambio
Grábatelo a fuego. Hacer networking no significa solo pedir y recibir, también hay que dar. Es más, tienes que estar dispuesto a dar mucho, ayudar a tus compañeros y aportar todo aquello que puedan necesitar sin esperar contrapartidas.
Esa situación de equilibrio se mantiene por que todos actúan de la misma manera, es algo mutuo. Con el paso del tiempo aumentará la confianza y empezarán fructificar las relaciones laborales generadas.
La puntualidad es un tanto a tu favor
No sólo es una muestra de respeto hacia el resto de compañeros, también te ayudará a transmitir una imagen de responsabilidad y compromiso con el grupo.
Además y según he podido comprobar, si llegas con antelación dispones de un tiempo extra para hablar con más tranquilidad con tus compañeros siendo una ocasión excelente para conocerlos mejor y fortalecer los contactos iniciados.
De igual forma, una vez finalizada la sesión tampoco seas de los primeros en marcharte. Ten previsto ese tiempo en tu agenda y utilízalo para socializar.
Relaciónate con las personas que no conoces
Intenta no estar siempre con personas con las que ya tienes amistad o que conoces de otras sesiones y toma la iniciativa presentándote a personas con las que todavía no has hablado.
De igual forma procura no sentarte siempre con los mismos compañeros, eso facilitará entablar nuevas relaciones y contactos.
Aunque a todos nos produce cierta ansiedad estar en una sala con personas que conocemos poco piensa que esos momentos ,al principio y final de las reuniones, son los ideales para consolidar los vínculos con tus compañeros.
Participa activamente procurando dirigirte a las personas que están solas, no sólo las ayudarás a sentirse más cómodas si no que a tí también te servirá para estar más relajado.
Practica tu autopresentación
Es un momento importante así que no dejes lugar para la improvisación. Si no lo haces así corres el riesgo de no poder decir todo lo quieres o que tu mensaje no despierte el interés de tus compañeros.
Te aconsejo que practiques tu presentación. Escribe lo que quieres decir y ensaya una autopresentación de 20 a 30 segundos. Piensa que siempre es más fácil repetir un discurso que hacerlo por primera vez y, sobre todo, con personas delante.
Céntrate en los beneficios, es decir, qué puedes hacer por los demás y explica a los asistente cuál es tu mercado y tus necesidades. Una buena estrategia es hablar de tu marca a través de los proyectos que tienes en marcha.
Ten presente que mientras más específico seas, más fácil será para tus compañeros saber en qué te pueden ayudar.
Cuida esa «primera impresión»
Se dice que tenemos menos de 10 segundos para causar una buena primera impresión. Por eso, en el momento de presentarte o ser presentado a otras personas recuerda extender la mano al saludar, sonreir y mantener un contacto visual amable.
Mi consejo es que seas tú mismo y, sobre todo, que muestres un interés real por tus compañeros. Eso es algo que los demás notan y agradecen. Si además tienes una conversación interesante, serás el compañero ideal.
Acostúmbrate a ceder la palabra y procura no hablar durante más de un minuto seguido. No olvides que todo gira alrededor de la otra persona.
Tarjetas de presentación
Aunque el intercambio de tarjetas forma parte del protocolo de cualquier sesión de networking tampoco se trata de coleccionarlas.
Piensa que una tarjeta de presentación es algo más que un soporte para dejar información de tu marca a otras personas y cómo pueden ponerse en contacto contigo, también es una buena excusa para iniciar una conversación o presentarte a alguien que no conoces.
Dedica un poco de tiempo al diseño y procura que tu tarjeta sea un fiel reflejo de tu imagen de marca, ayudará a que las personas te identifiquen y recuerden más fácilmente.
Habla menos y escucha más
Escuchar es una manera de poder conocer a alguien y hacer sentir a la otra persona importante, un sentimiento que a todas nos agrada. Esta es también una manera de aprender más sobre esa persona y determinar si hay áreas de mutuo interés.
No te aproveches de la situación o seas pesado, procura anticiparte y saber cuando estas con alguien que no busca lo que tu estás buscando
Mantén un contacto regular
Si hay un aspecto que debes cuidar al máximo es mantener un contacto regular con las personas que haces networking.
Las ocasiones especiales, enviar información de interés o una simple llamada para saludar son buenos motivos para fortalecer las relaciones laborales y, por supuesto, cumple los compromisos adquiridos con tus compañeros. Si has quedado en llamar, hazlo.
No dejes de ampliar tu red de contactos y haz un seguimiento adecuado de ellos, y aunque no todos los contactos que hagas encajarán en tu estrategia, es importante que mantengas la relación ellos ya que nunca se sabe lo que puede pasar en el futuro
Reserva unos minutos de tu tiempo cada semana para mandar correos electrónicos a tu red de contactos y conviértela en una tarea más de tu trabajo.
Conclusión
No basta con tener un listado de contactos de email o LinkedIn. Para impulsar tu marca y ampliar tu red de contactos también es necesario participar activamente en estos eventos y saber cómo hacer networking estableciendo nuevas relaciones laborales.
Pero para que tu participación en estas actividades sea provechosa es necesario que tengas claros tus objetivos, que estés dispuesto a conocer personas nuevas y que utilices bien tu tiempo practicando previamente tus presentaciones.
Recuerda que participar en los eventos con actitud positiva y mostrando empatía te ayudará a crear nuevos contactos y que cuidar tu relación con ellos a lo largo del tiempo servirá para construir relaciones de confianza.
Ya me contarás qué tal te va poniendo en práctica estos consejos.